Milei relanza su gestión con el pacto en Tucumán
El presidente Javier Milei tendrá este lunes su esperado Pacto de Mayo, evento en donde -a la medianoche- se firmará un Acta con diez acuerdos básicos para establecer políticas de mediano y largo plazo que, según alegan en la Casa Rosada, permitirán «sacar a la Argentina adelante».
El acto tendrá lugar en la Plaza Independencia de Tucumán; allí estará presente todo el Gabinete Nacional, 17 gobernadores, delegados de cámaras empresarias y Mauricio Macri, como el único de los exmandatarios que aceptó la invitación.
La realización de esta ceremonia se hizo esperar. Fechada originalmente para el 25 de mayo, el Pacto debió posponerse por las demoras que sufrieron la Ley Bases y el paquete fiscal, sancionadas dos semanas atrás. Esa aprobación legislativa es considerada por el Gobierno como la culminación de una primera fase de la gestión mileista.
Ahora, esperan que la firma del Acta de Mayo funcione como una suerte de salvaguarda para que la oposición se comprometa a apoyar las medidas que el oficialismo proponga y que se atengan a los diez lineamientos refundadores.
Aun así, diferentes actores de la oposición que se mostraron colaborativos con el Gobierno afirman -en público y en privado- que con las facultades delegadas y las nuevas herramientas de gestión que le fueron brindadas a Milei, serán más escrupulosos con la gestión nacional.
Signo de ello es el comunicado lanzado el sábado por Hacemos Coalición Federal, el bloque que en Diputados preside Miguel Pichetto, que rechazó la invitación para ir a Tucumán y le pidió al oficialismo «acciones concretas» y «una relación institucional razonable». Los cuatro ministros de la Corte Suprema, los expresidentes (a excepción de Macri) y las entidades gremiales también se ausentarán.
Este último sector es uno de los seis que serán citados con posterioridad a la firma del acta para constituir el Consejo de Mayo, un organismo ad-hoc que tendrá un representante del Poder Ejecutivo, de Diputados, del Senado, de las provincias, de las entidades gremiales y del sector empresarial para discutir y formular los proyectos que permitan cumplir con los diez acuerdos del Pacto.
Milei defendió su plan económico desde Brasil
El presidente Javier Milei encabezó este domingo la Conferencia de Política de Acción Conservadora (CPAC) en la ciudad de Camboriú, en Brasil, donde hizo una defensa a ultranza de su plan económico, cargó contra el socialismo y denunció que Jair Bolsonaro sufre «una persecución judicial».
Acompañado de su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y del vocero Manuel Adorni y el ministro de Defensa, Luis Petri, el jefe de Estado subió al escenario cerca de las 17 horas y comenzó un aireado discurso en defensa de la libertad económica y en contra de los gobiernos socialistas. “Hoy quiero hablarles de la receta económica y cultural del socialismo en América Latina, de que ellos están equivocados y nosotros tenemos razón”, dijo en primer lugar.
“En primer lugar, es notable que los socialistas comienzan con un periodo de bonanza económica, en un contexto de cuentas públicas ordenadas y precios de commodities en alza. En este primer momento, la economía crece, la sociedad gana en poder adquisitivo, el Estado recauda y el Banco Central acumula reservas», enumeró, para luego señalar que, acto seguido «los socialistas se enamoran de la popularidad generada por la bonanza que heredaron, se asustan de que no vaya a ser eterna y aumentan indiscriminadamente el gasto público para sostenerla”.
El mandatario argentino aseguró que, en esos contextos, los gobierno socialistas avanzan “subsidiando tarifas y servicios, aumentando el empleo público y repartiendo dádivas de distinto tipo, lo cual etiquetan como ‘inclusión social’”. Sin embargo, «cuando la plata se acaba, empiezan a aumentar los impuestos para recaudar más, pero a costo de contraer la actividad y reducir la inversión”.
Luego señaló que cuando no pueden recurrir al endeudamiento o a la creación de nuevos impuestos «recurren al por de todos los males, que es la emisión monetaria, destruyendo así el valor de su moneda y condenando a toda su sociedad a la pobreza”. Según dijo, se trata de un mecanismo para «tener cautiva» a la sociedad y «mantenerse en el poder». El costo «tarde o temprano, lo paga la gente».
«Una y otra vez, la historia demuestra que los mismos que se llenan la boca hablando de la democracia, de pluralismo y de opresión, son los que están dispuestos a romper las reglas e incluso interrumpir el orden constitucional para atrincherarse en el Palacio cuando el pueblo reclama un cambio», cuestionó el presidente argentino y enarboló una serie de ejemplo: «Miren a Venezuela que ya no queda ni un solo gobierno sensato en el mundo que no reconozca que es una dictadura sanguinaria; miren lo que pasó en Bolivia en el 2019, cuando Evo Morales se obstinó con un tercer mandato inconstitucional; miren la persecución judicial que sufre nuestro amigo Jair Bolsonaro aquí en Brasil”.
Tras acusar al socialismo de ser culpable de «la matanza de 150 millones de personas» con sus políticas económicas, Milei fue más allá y negó que la izquierda «sea la ideología de los pobres y oprimidos». «Cada día queda más claro en América Latina que la izquierda es la ideología de los ricos, de los poderosos que controlan y tienen posiciones prominentes en la difusión cultural, todos entongados con el poder», denunció.