Una madre decidió hacer pública su situación. La justicia la apartó de su hija lactante de tan solo dos años y es investigada por presuntas amenazas.

El calvario por el cual atraviesa Maricel Sánchez se originó tras que su pareja fuera internada en terapia intensiva, luego de sufrir un accidente de tránsito en la ruta 7 entre Trelew y Rawson, el pasado viernes 14 de junio.

“En medio de esta tragedia, la madre de mí compañero comenzó a enviarme mensajes culpándome del accidente”, declaró Sánchez quien luego informó que le impidieron poder visitarlo argumentando que no tenía derecho por no estar casada con él.

Seguidamente, la familia del hombre la denunció penalmente por amenazas y maltrato hacia la niña, tomando como punto “algunos mensajes de texto que fueron enviados a mi pareja durante momentos de colapso emocional por depresión postparto”, dijo.

Ante esta denuncia, la justicia dictó una medida precautoria y la separó de su hija lactante de tan solo dos años a la espera de tener una respuesta desde el Servicio de Protección y para que así la jueza de Familia Subrogante del Juzgado N° 3 de Puerto Madryn, Dra. Delma Viani, resuelva.

“Me entrevistaron del Servicio, todo fue muy favorable, pero la Jueza todavía no resuelve nada. Eso recién podría ser el lunes, luego del fin de semana largo y es mucho tiempo para mí hija”, resaltó Sánchez y agregó: “Ella ahora está en la casa de una amiga y pide constantemente por mí, me necesita”.

La medida precautoria de siete días fue considerada como intolerable, ya que “debe primar el interés superior de mi hija. Cada día de separación es un daño irreparable para ella, especialmente siendo lactante”.

Este fuerte reclamo  es para que la jueza se expida lo antes posible y luego de “haber sido separada abruptamente de su rutina y de su fuente de alimentación”.